Especial VI: Refugiados
Xavier Aldekoa y Agus Morales se encargan de cerrar la jornada ofreciendo un decálogo con todo lo que ellos querrían haber sabido cuando eran estudiantes
Con una complicidad entre ambos ponentes que se puede sentir desde el inicio de la ponencia, Aldekoa y Morales dedican algunas palabras a los estudiantes que se acercan a hablarles o que les piden que les firmen alguno de sus libros.
Aldeko y Morales conversan entre ellos y se proponen dar algunos consejos a los alumnos de la Facultad de Comunicación.
Según Aldekoa, especializado en temas africanos que trabaja para varios medios, entre los cuales se encuentra La Vanguardia, el objetivo de un periodista es intentar explicar historias a través de retos. Los retos que planteaba eran:
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Ir más allá de la herida.
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Entender e insistir.
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Utilizar los sentimientos y saber manejarlos.
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Equivocarse.
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Ir a la raíz de la historia.
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Hacer cosas grandes con cosas pequeñas.
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No sólo conocer a los “malos”.
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Conseguir que importe.
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Los dos compañeros mantienen un diálogo relajado sobre esos retos hasta que finalmente llegan conjuntamente a conclusiones sobre los retos de ser periodista.
- Un periodista debe tener en cuenta su poder y hacer justicia, no puede quedarse en las etiquetas, tiene que ir más allá para contar una historia real.
- Un periodista tiene que escuchar y entender lo que quiere contar para poder escribirlo.
- Un periodista puede utilizar los sentimientos para explicar su relato y conseguir que quién lo recibe sienta lo mismo, aun así, no debe dejarse llevar por las emociones.
- Un periodista, insistía Aldekoa, se equivoca: “¡Os vais a equivocar y es lo mejor que os va a pasar!”, clarificaba que uno no siempre encuentra aquello que busca, pero aun así puede encontrar una buena historia que contar.
- Un periodista tiene la responsabilidad de buscar el origen de las historias, de explicar el contexto y de encontrar la razón (el porqué).
- Un periodista debe construir historias a partir de pequeños detalles.
- Un periodista tiene por deber conocer todas las historias, sean buenas o malas, alegres o tristes, grandes o pequeñas. Todas las historias son importantes y no se trata solamente de hablar de los “verdugos” o de los “violadores”.
- Un periodista debe buscar una manera de narrar sus historias que haga que llegue a las personas y conseguir les importe lo que cuenta.
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A continuación, después de haber reflexionado sobre el oficio del periodista, se acercaron más a los futuros periodistas y les ofrecieron un decálogo con consejos que ellos consideraban importantes. “Ojalá me hubieran dado estos consejos cuando estudiaba”, declaraba Agus Morales.
Una vez más, los dos ponentes reflexionan sobre los consejos y aceptan preguntas de los estudiantes. Su manera relajada y cercana de expresarse anima a los alumnos a seguir con aquello que les gusta y persistir aunque a veces se diga que “ser periodista es una mierda”, como apuntaba Jordi Évole. Además, aprovecharon para contar anécdotas personales sobre sus inicios en la profesión y, al final, añadieron un último consejo: Hacer un seguimiento de las historias que cuentas.
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